(Nota: El artículo original fue escrito por David Helman, escritor para DallasCowboys.com, y traducido al español para SomosCowboys.com)
FRISCO, Texas - Como siempre, esta es la parte del año en la que hay muchas preguntas.
Aproximadamente un tercio de los rosters de la NFL cambian cada temporada baja a medida que cada club busca formas de mejorar su suerte en el futuro. Los Cowboys no son diferentes, ya que enfrentarán muchas decisiones difíciles en los próximos meses.
Con eso en mente, hoy evaluamos la posición de apoyador y qué opciones enfrenta la oficina principal en 2021.
¿Qué les espera a Sean Lee y Leighton Vander Esch?
Es notable lo similares que ya parecen estas dos carreras.
Los Cowboys seleccionaron a un apoyador de gran talento que no perdió tiempo en mostrar una asombrosa cantidad de talento e inteligencia. Lo único que le impide estar entre los mejores apoyadores de la NFL es su propia capacidad para permanecer en el campo.
Ese párrafo describió a Sean Lee durante gran parte de la última década y, desafortunadamente, actualmente describe lo que los Cowboys están viviendo con Leighton Vander Esch.
Las especulaciones rodearon a Vander Esch en este momento el año pasado, luego de que se perdiera los últimos seis juegos de la temporada por una lesión en el cuello que requirió cirugía. Dada la cantidad de comentarios sobre su durabilidad, no es sorprendente que estuviera cansado de escucharlo cuando el equipo se presentó al campamento de entrenamiento.
"Ya no me preocupa el cuello. No hablo de eso", dijo Vander Esch en agosto. "Es lo que es y la gente puede pensar lo que quiera".
Hay que darle crédito porque en realidad su cuello no le dio ningún problema en 2020. Pero desafortunadamente, otras cosas sí.
Vander Esch se fracturó la clavícula al principio de la derrota de la Semana 1 ante los L.A. Rams y estuvo fuera de la alineación durante cinco semanas mientras se recuperaba. Regresó bastante rápido, logrando jugar 32 jugadas contra Arizona el 19 de octubre.
Luego jugó los siguientes nueve juegos, sumando 57 tacleadas y un gran balón suelto forzado en la derrota del 1 de noviembre ante Philadelphia. Desafortunadamente, sufrió una lesión en el tobillo en la victoria del 20 de diciembre contra San Francisco y se vio obligado a perderse los dos últimos juegos de la temporada mientras los Cowboys luchaban por un puesto en la postemporada.
Al hablar con Vander Esch inmediatamente después de la temporada, está claro que los problemas de lesiones adicionales fueron una fuente de frustración.
"Voy a entrenar lo más que pueda esta temporada baja", dijo. "Realmente no me iré a ninguna parte. Me iré a casa por dos semanas y volveré enseguida. Estaré aquí entrenando hasta febrero, marzo y abril. Eso es exactamente lo que es. Ya estoy deseando que llegue. Estoy en una misión, y creo que todos los chicos también deberían estarlo".
Nadie podría cuestionar la mentalidad de Vander Esch, pero su estatus sí crea una gran pregunta y una decisión importante para los Cowboys. Como selección de primera ronda en 2018, su contrato de novato viene con una opción de equipo para un quinto año.
Los Cowboys tienen hasta mayo para decidir si elegirán esa opción, que extendería el contrato de Vander Esch hasta la temporada 2022 a un costo inflado. Si deciden no hacerlo, Vander Esch se dirigirá a la agencia libre el próximo año.
Por un lado, cuando está sano, Vander Esch es uno de los mejores defensores del equipo. Por otro lado, ¿querrá la oficina principal extender el contrato de un apoyador que se ha perdido 13 juegos por lesión en los últimos dos años?
Por lo menos, es un problema que no debería parecer nuevo para los Cowboys. Lee no fue una selección de primera ronda, ocupando el puesto de la selección global número 55 en 2010, pero ha enfrentado el mismo problema del potencial All-Pro, junto con desafortunados problemas de lesiones.
A la edad de 34 años, Lee ya no es una pieza central de esta defensa, pero él y los Cowboys también se enfrentan a una decisión.
Lee pensó en retirarse después de la temporada 2019, pero el hecho de que logró jugar los 16 juegos, sin mencionar su obvio amor por el juego, lo llevó a regresar bajo un contrato de un año y $4.5 millones la primavera pasada.
Las lesiones fueron un problema mayor en 2020, ya que Lee se perdió el campamento de entrenamiento y la primera mitad de la temporada por una hernia deportiva. Pero, al regresar en noviembre, logró jugar los últimos nueve juegos, sumando 20 tacleadas mientras jugaba el 30% de las jugadas.
"Creo que físicamente, a veces dices: 'Has pasado por mucho'', dijo Lee en diciembre. "Y luego salgo y me siento genial, y puedo ayudar, y eso muchas veces me empuja a regresar".
Lee dijo que planea tomarse un tiempo para tomar su decisión, tal como lo hizo el año pasado. Si opta por volver, ¿sería con los Cowboys? Y si no lo hace, ¿cuál es el plan de juego para reemplazarlo? Los apoyadores veteranos Joe Thomas y Justin March también serán agentes libres, lo que significa que los Cowboys actualmente tienen poca profundidad detrás de Jaylon Smith y Vander Esch.
Eso lleva a dos grandes decisiones. La primera, en lo que respecta al futuro a largo plazo de Vander Esch; y la segunda, en lo que respecta al futuro de Lee.
Esas dos decisiones no solo darán forma al cuerpo de apoyadores del equipo en 2021, sino que determinarán los próximos años.
