De nueva cuenta estos Vaqueros buscan mostrar su superioridad ante la División Norte de la AFC en juego ante las Urracas de Baltimore.
Las victorias ante los Bengalíes, Cafés y Acereros del equipo de la estrella solitaria han demostrado que luego de varias temporadas de ser el hazmerreir en cuanto a divisiones, la Este de la NFC de pronto hace su reaparición en la escena. La marca de 8-1 de los Vaqueros opaca la marca de 5-4 que tiene el equipo de John Harbaugh y todo con el hecho de que ambos están en primer lugar de su propia división.
Luego de ser una de las divisiones más consistentes en la NFL, aparte de los pobres muchachos de Cleveland, los equipos de Pittsburgh, Cincinnati y Baltimore tienen sólo una victoria ante nueve cosechadas por las cuatro franquicias que conforman la Este de la NFC en la presente temporada regular.
Para la jornada 10 los pupilos de Jason Garrett de nuevo enfrentan un reto verídico con este equipo del este de la unión americana. Quizás esta edición de los emplumados no tenga un porte ofensivo, como ha sido la costumbre en la era Joe Flacco con el equipo, pero la defensiva da mucho de que hablar, siendo la número uno ante el acarreo. Hace recordar aquella confrontación ante los Empacadores en Green Bay en el legendario Lambeau Field donde llegaba la mejor defensiva ante el acarreo en contra de la mejor ofensiva corriendo el balón con el resultado final favoreciendo a Ezekiel Elliott.
Ahora con la mejor marca de la liga, y luego de una semana llena de drama en cuartel general vaquero de The Star en Frisco, aquí pasemos a las cinco claves rumbo al domingo.
Clave 1 –Una semana dedicada a Tony Romo. La telenovela desatada con esta versión de los Vaqueros de Dallas pudiera resumirse en gran parte en el recién y ahora pase oficial de la antorcha en la posición de mariscal de campo. Desde la lesión de Tony Romo en la tercera jornada de la pretemporada, y el surgimiento de un Dak Prescott que tiene a la NFL en el filo de la butaca, cada semana de la temporada regular ha sido otro paso más en un proceso que tiene la atención de todos. La conferencia de prensa de Romo donde de manera oficial dictaminó que ahora era el reserva en el puesto, fue analizado de todos los ángulos habidos y por haber, y ahora este hecho tendrá un peso secundario pero visible sobre el equipo tomando en cuenta que por primera vez estará equipado listo para entrar al quite de ser necesario. A sus compañeros entrañables como Jason Witten y sus guardaespaldas de la línea ofensiva, el tenerlo a un lado debe ser un aliciente considerando que de momento, y en palabras del mismo Romo, pasan por un momento por demás mágico.
Clave 2 –Lesiones notables de ambos lados. Ya para estas alturas el jugador que no cargue con algún malestar simplemente no ha jugado. Todos los titulares y jugadores de rotación traen algo que les quita un porcentaje de su efectividad y para muchos es como hacen a un lado este hecho para poder sobresalir con cada juego cuando se llega a la segunda vuelta de la temporada regular. Para los Vaqueros, la baja del ala cerrada Geoff Swaim y su respectiva salida al ser puesto en la lista de lesionados, afecta la mezcla con Jason Witten, especialmente en asignaciones de bloqueo en el juego terrestre, dándole así más visibilidad al desaparecido Gavin Escobar. Importante hacer notar la inclusión en los 53 y posible activación entre los 46 del domingo del receptor abierto Vince Mayle de la escuadra de práctica, tomando el lugar en el roster de Swaim. Aquí la idea es usarlo en equipos especiales, pero también en asignaciones de bloqueo cuando se tire la bala lateral hacia Cole Beasley en busca de perder al chaparrón en jugadas de posesión e inclusive entrar a las trincheras como hombre en movimiento. Mayle es un receptor de tamaño, inclusive de mas grosor que Dez Bryant y los demás, y su uso pudiera ser estratégico.
Clave 3 – Otro reto para el extraterrestre. Como ha venido comentando el buen Luis Fernando Perez, Ezekiel Elliott es de otro planeta – no se sabe de donde, pero cayó del cielo y sigue siendo un verdadero energúmeno en cuanto al acarreo de balón, recibiendo pases e inclusive en asignaciones de bloqueo. De nueva cuenta, así como ante los Gigantes en la primera semana, ante los Bengalíes y los Empacadores, la consigna es demostrar que los Vaqueros pueden establecer el juego terrestre que tanto los caracteriza ahora ante una peligrosa y activa frontal de las Urracas de Baltimore. El 3-4 defensivo de los visitantes busca contar con un tocado ala defensivo Timmy Jernigan con 5.0 capturas, que lidiará con el tackle derecho Doug Free, Lawrence Guy del lado de un también afectado Tyron Smith, que no practicó del todo durante la semana, y quien sabe donde andará portando sus 6.0 capturas el apoyador Terrell Suggs en su asignación por todos lados de la línea. El hecho de poder lidiar con esta frontal será vital en cuanto a la protección de Dak Prescott, estableciendo ante todo el juego terrestre, que da cabida a los pases cortos de posesión, para luego abrir los aires sabiendo que el esquinero Jimmy Smith no ha practicado con lesión en la espalda.
Clave 4 – El llegarle a Flacco. Semana tras semana la consiga defensiva es llegarle al mariscal de campo contrario, sea este quién sea. En el caso de Big Ben, le pudieron llegar en momentos, pero como los hizo sufrir con esa jugada de laboratorio en pase sorpresa combinándose con Antonio Brown para una sonada anotación. Joe Flacco es el indiscutible bajo centro, y su 'rating' de menos de 80.0 demuestra que del lado ofensivo el equipo de este hermano Harbaugh no es su carta de presentación como lo es el caso del su rival de la jornada. Llegan tocados los linieros ofensivos Alex Lewis y Marshall Yanda, y el juego terrestre con Terrance West y Justin Forsett no espanta a nadie, mientras que los receptores Mike Wallace y Steve Smith Sr. pudieran ser factor de poder desenredar la línea de golpeo. De nuevo la presencia de suplentes en la secundaria vaquera es factor, siendo el delicado balance entre presión al mariscal de campo, detener el acarreo y la cobertura a media distancia será responsabilidad de los Wilcox, Scandrick, Carr y hasta McFadden, que fue el que se quedo en el camino en aquella sonada jugada de Roethlisberger a Brown.
Clave 5 – Lucha de cerebros. Estos Vaqueros no han dependido de las jugadas espectaculares para su racha de ocho victorias de manera consecutiva, más que nada siendo la ejecución de una ofensiva marcapasos que ya al finalizar el juego tiene al contrario en las cuerdas. Evidencia de ello fue el acarreo de Elliott de 32 yardas para el clavo final ante Pittsburgh, donde un equipo defensivo acerero se mostró falto de energía y listo para el horno de la fundidora. Jason Garrett se ha mostrado agresivo en momentos a la ofensiva durante la temporada, y por su lado John Harbaugh sabe que su lado defensivo es el bueno, y esto delata una verdadera lucha estratégica donde se espera un volado en la pausa de los dos minutos final. Para los Vaqueros una victoria cerrada donde no es necesariamente el imponerse de manera demoledora pero el poder sobrevivir al contrario es una manera de saber que alguna jugada sorpresa o de equipos especiales pudiera ser la característica de un encuentro de toma y daca. Evidencia que los timoneles de cada lado tendrán la última palabra.