(Nota: El artículo original fue escrito por Kurt Daniels, editor de Dallas Cowboys Star Magazine, y traducido al español para SomosCowboys.com)
Y con eso, una de las temporadas más decepcionantes en la historia de la franquicia llega a su fin.
Los Dallas Cowboys al menos ganaron su último juego de la temporada regular, derrotando a los Washington Redskins, 47-16, para terminar el año con un récord 8-8. Pero al no haber asegurado el título de la NFC Este la semana pasada, el equipo ya no controlaba su propio destino.
Por lo tanto, los Cowboys dependían del resultado del juego de los Eagles contra los Giants, y desafortunadamente, Filadelfia también ganó su partido. Los Eagles dejaron de lado a Nueva York, 34-17, para ganar el título de la división con un récord 9-7 y dejar a los Cowboys fuera de la postemporada.
Eso básicamente le dio poca importancia a la victoria dominante que tuvo Dallas. Ezekiel Elliott corrió 18 veces para 122 yardas y dos touchdowns, mientras que Michael Gallup obtuvo 98 yardas en cinco pases y un récord personal de tres anotaciones.
Amari Cooper agregó 92 yardas de recepción y Randall Cobb otras 81, haciendo que Dak Prescott disfrutara de un gran día contra la defensa de Washington. El mariscal de campo completó el 69.7 por ciento de sus pases para 303 yardas, cuatro touchdowns y un índice de pasador de 138.0. Detrás de esos esfuerzos, los Cowboys acumularon un total de 517 yardas en ofensiva – la tercera vez que superan la marca de 500 yardas esta temporada.
Defensivamente, los Cowboys mantuvieron el rumbo, limitando a los Redskins a 271 yardas. Dallas recuperó el balón dos veces, logró dos capturas y siete tacleadas para pérdida. La defensa solo permitió 1 de 12 conversiones de tercera oportunidad y detuvo a Washington en sus tres intentos de cuarta oportunidad.
La defensa de Dallas salió fuerte, pero la ofensiva del equipo tuvo problemas para mover el balón al principio. La defensa recuperó el balón en cada una de las dos primeras posesiones de los Redskins. La primera llegó cuando el apoyador Jaylon Smith atrapó su primera intercepción de la temporada, lo que le dio a los Cowboys el balón en la línea de 36 yardas de Washington.
Luego, el apoyador Malcolm Smith le quitó el balón a Adrian Peterson en la próxima serie de los Redskins y el profundo Xavier Woods recuperó el balón suelto, llevándolo a la línea de 21 yardas del oponente.
Pero a pesar de la posición privilegiada en el campo, los Cowboys solo pudieron anotar goles de campo en ambas ocasiones. Kai Forbath pateó desde las 28 y 47 yardas para darle al equipo local una ventaja de 6-0 en el primer cuarto.
Sin embargo, antes del final de la primera mitad, los Cowboys pudieron tomar una ventaja de dos dígitos. Washington llegó al tablero con un gol de campo de 31 yardas a principios del segundo cuarto, pero Dallas respondió con un par de touchdowns de Elliott en sus siguientes dos posesiones.
El primer touchdown fue destacado por una recepción de 48 yardas de Cooper, quien hizo un salto espectacular entre dos defensores. Dos jugadas después, Prescott corrió a su izquierda y luego lanzó un pase de 13 yardas a Elliott, quien tocó de puntillas la línea lateral de la zona de anotación para el primer touchdown del partido.
El siguiente touchdown de Elliott también fue algo bello, pero esta vez el corredor hizo el trabajo él mismo. Buscó paso a través de la defensa, cruzando la línea de gol para completar el acarreo de 33 yardas – su acarreo más largo de esta temporada – y darle a los Cowboys una ventaja de 20-3.
Sin embargo, con 3:45 restantes en la primera mitad, los Redskins pusieron en marcha a su ofensiva una vez más. Después de un castigo - que negó una captura en tercera y 9 - por culpa de Smith, el mariscal de campo Case Keenum completó sus siguientes seis pases para 46 yardas. El último fue un pase de touchdown de 6 yardas que cambió el marcador a 20-10 para el inicio del medio tiempo.
Y cuando los Redskins tomaron la posesión inicial del tercer cuarto, la ofensiva marchó hacia abajo para un gol de campo de 42 yardas. No hace falta decir que las cosas se estaban poniendo interesantes.
Fue entonces cuando el juego se convirtió en el show de Michael Gallup. El receptor anotó touchdowns en tres de las siguientes cuatro posesiones de los Cowboys. La primera anotación vino después de que Prescott completara pases de 21, 23 y 17 yardas antes de finalmente conectar con Gallup para el touchdown – el receptor cayó justo dentro de los límites en un bonito y rápido salto.
A pesar de lo agradable que fue eso, la próxima anotación de Gallup fue quizás aún mejor. Los dos equipos habían intercambiado goles de campo cuando los Cowboys se encontraron nuevamente con el balón, aunque no lo tuvieron por mucho tiempo.
La ofensiva solo necesitó cuatro jugadas para llegar a la zona de anotación, cortesía de Gallup, quien en tercera y 2 en la línea de 32 yardas de Washington atrapó un pase por debajo – sorprendentemente mantuvo el balance de los pies después de dar un giro mientras un defensor trataba de taclearlo por abajo, y luego corrió por la línea lateral izquierda para el touchdown.
Por supuesto, tres jugadas fueron todo lo que se necesitó en la primera posesión del equipo en el último cuarto, ya que esta vez Gallup corrió para 65 yardas para anotar el último touchdown.
El juego ya estaba decidido. Forbath agregó otro gol de campo, completando 9 de 9 patadas, para sellar el marcador, 47-16.
A pesar de que los Cowboys dominaron el partido, fue un día decepcionante ya que la victoria de los Eagles puso fin a la temporada de Dallas. Ahora la atención se centra en las muchas preguntas que deberán responderse durante la próxima temporada baja – una que comenzó demasiado pronto para un equipo de los Cowboys que ingresó a la campaña 2019 con aspiraciones de Super Bowl.
