FRISCO, TX — Fue una victoria convincente para los Dallas Cowboys sobre los Cleveland Browns en la Semana 1, al derrotarlos por 33-17 en el Huntington Bank Stadium, y los primeros salieron prácticamente intactos del proceso (la palabra clave es "casi intactos"). Perdieron al ala cerrada del Pro Bowl Jake Ferguson por una lesión de rodilla en el tercer cuarto, y no regresó al partido.
Terminaría con 15 yardas en tres recepciones.
Se vio a Ferguson salir del vestidor después del juego sin la ayuda de nadie, y sin una rodillera ni muletas, con solo una bolsa de hielo adherida a su rodilla. Las pruebas iniciales mostraron que su ligamento cruzado anterior estaba intacto, pero se programó una resonancia magnética para el lunes por la mañana en Dallas.
La noticia fue buena, como señaló Ferguson en las redes sociales.
"¡Dios es bueno!", publicó.
Ferguson sufrió solo un esguince de ligamento medial colateral, y la lesión está lejos de ser algo que le ponga fin a su temporada. De hecho, Mike McCarthy dijo el lunes que Ferguson estaría trabajando con el grupo de "regreso al juego" esta semana en la práctica.
Hablando con los medios después del juego, el mariscal de campo All-Pro Dak Prescott habló sobre el estado de Ferguson y su valor para la ofensiva.
"Ni siquiera voy a empezar a hablar sobre lo que extrañaríamos, [porque] creo que hemos esquivado uno grande", dijo Prescott. "... Simplemente hablar con él me dio mucha confianza de que estará bien y que podrá regresar. Y ya sea nada o un par de semanas, sé que, sí, ni siquiera puedo pensar en lo que extrañaríamos de ese chico.
"Solo su mentalidad, lo que aporta al juego, donde hemos crecido y nuestra conexión. Estaremos bien. Él estará bien".
Las palabras de Prescott suenan ciertas apenas horas después, y los Cowboys pueden exhalar un suspiro colectivo de alivio ante la noticia, aunque mientras tanto tendrán que adaptarse.
Esa adaptación contará en gran medida con el ala cerrada novato no seleccionado en el draft Brevyn Spann-Ford y el talento de segundo año John Stephens Jr. asumiendo la mayor parte del trabajo que de otro modo habría recaído en Ferguson, con la ayuda en ese ámbito del ex seleccionado de segunda ronda Luke Schoonmaker; y Princeton Fant probablemente será ascendido del equipo de práctica en los días de juego como una mano amiga para el entrenador de alas cerradas Lunda Wells.
Sin embargo, Stephens fue descartado para el primer partido de la temporada por una lesión en el tendón de la corva, por lo que necesitará recuperarse para poder contribuir en lo que eventualmente será su debut en la NFL después de regresar de un desgarro del ligamento cruzado anterior que sufrió como novato en 2023.
Si bien Schoonmaker tiene la capacidad de atrapar el balón, su principal habilidad es el bloqueo, mientras que Spann-Ford y Stephens son lo inverso: se ganan la vida atrapando el balón y complicando la vida a los apoyadores más pequeños y a los esquineros nickel debido a su capacidad atlética.
Ferguson viene de una temporada destacada y su tipo de producción no será fácil de reemplazar, pero hay suficiente talento detrás de él, gracias a que los Cowboys no arriesgaron a Spann-Ford a la lista de waivers, para complementar una parte de él.
