(Nota: El contenido original fue escrito por David Helman, escritor para DallasCowboys.com, y traducido al español para SomosCowboys.com)
FRISCO, Texas - Por segunda vez esta temporada, Ezekiel Elliot recibió una orden de restricción temporal en la corte, evitando su suspensión de seis juegos en la NFL y permitiéndole continuar jugando mientras se resuelve el problema.
La orden de restricción fue otorgada por el Tribunal Federal del Segundo Distrito el martes por la noche, y permitirá que Elliott regrese a la lista durante las próximas dos semanas. El corredor All-Pro fue suspendido al final de la semana pasada cuando el Juzgado del Quinto Circuito anuló la orden judicial que se le otorgó a principios de esta temporada.
Sin embargo, a diferencia de la orden judicial anterior, la resolución de esta semana es válida por aproximadamente dos semanas, o hasta que la jueza Katherine Polk Failla tome una decisión sobre el caso actual. Failla actualmente está de vacaciones, y Jude Paul Crotty concedió la orden de restricción para permitirle tomar la decisión cuando regrese.
Eso debería hacer que Elliott juegue el domingo contra los San Francisco 49ers, y potencialmente la próxima semana contra los Washington Redskins, pero su estado después de esos dos partidos aún no está claro.
Como ya saben, esta saga inició en el verano, cuando la NFL suspendió a Elliott por seis juegos por acusaciones de violencia doméstica. Elliott y su equipo legal apelaron esa decisión con la liga. Tras perder esa apelación, solicitó una orden judicial que finalmente se le concedió en Sherman, Texas.
La NFL apeló esa decisión ante el tribunal del Quinto Circuito, donde fue revocada el jueves por la tarde. Elliott fue suspendido por la liga inmediatamente después, aunque la decisión del martes lo dejará en libertad para regresar a las instalaciones de los Cowboys.
Ha sido un largo proceso desde mediados de agosto, cuando se suspendió la suspensión, hasta este momento actual. Y mientras parece que Elliott estará nuevamente disponible por el momento, esta última orden de restricción asegura que la historia, de una forma u otra, todavía no ha terminado.
