FRISCO, Texas — No puede haber duda de que Leighton Vander Esch está experimentando una avalancha de emoción al anunciar oficialmente su retiro de la NFL, y a la temprana edad de 28 años, debido a un problema médico derivado de su última lesión en el cuello sufrida en Octubre de la temporada pasada -- una que llevó a un examen físico fallido con los Dallas Cowboys en marzo.
Vander Esch, cariñosamente apodado "Cazador de lobos" por los fanáticos de los Cowboys y que disfrutaba dejar escapar un aullido ocasional cada vez que el ex linebacker de Boise State hacía una jugada destacada, escribió una carta sincera al equipo, a los fanáticos y a la liga que le dio una oportunidad en 2018.
"Hoy es un día difícil para mí, pero también es un día de reflexión y agradecimiento. Jugar para la familia Jones, el entrenador Garrett, McCarthy, Marinelli, Richard, DQ, Bloom, George, AD y Scotty han sido los mejores días de mi vida. Mi sueño de jugar para los Dallas Cowboys se hizo realidad el 26 de abril de 2018. Esa noche será para siempre una noche que nunca olvidaré. Durante mis seis años como jugador de los Cowboys, siempre busqué el éxito y ganar partidos de fútbol, mientras me preparaba y entrenaba con los más altos estándares de competencia, pasión y perseverancia. Ha sido un honor representar a mi familia, a mis compañeros de equipo y a la gente de Dallas.
"Me doy cuenta de que ya no puedo cumplir con el estándar inquebrantable de excelencia que exige el fútbol americano profesional. Digo esto con gran pesar: me retiro médicamente de la NFL. Amo tanto el fútbol, pero mi cuerpo ya no coopera más. Aprecié cada momento de mi carrera en la NFL y ha sido una gran bendición jugar este deporte durante tanto tiempo. Este año, las cosas pueden parecer un poco diferentes para mí, pero el único objetivo es ser un gran esposo y padre para mi amada familia.
"Reflexionar sobre mis seis años en la NFL y todo lo que fue necesario para llegar a mi situación actual me recordó a las muchas personas a las que debo una gratitud humilde y sincera…"
Vander Esch continúo su carta agradeciendo a todas las personas importantes en su vida. (Haz clic aquí para ver la carta completa)
Se desconoce qué sigue para Vander Esch, un líder que fue fundamental para ayudar a guiar a los jugadores en el vestidor de los Cowboys y que también fue uno de los líderes más apasionados y respetados del equipo, al igual que su predecesor y mentor, Sean Lee.
Pero independientemente de lo que decida hacer en el futuro, una cosa es segura: lo atacará con su habitual pasión desenfrenada por ser grande.
Haber pasado de ser un joven con grandes sueños en Riggins, Idaho, a un talento premiado en Boise State y, en última instancia, a un apoyador estrella de los Cowboys es prueba de ello.
