(Nota: El contenido original fue escrito por David Helman, escritor para DallasCowboys.com, y traducido al español para SomosCowboys.com)
FRISCO, Texas -Lo que se ha especulado durante meses ahora es realidad: los Dallas Cowboys han cortado a Dez Bryant.
Los Cowboys cortaron a Bryant el viernes, y decidieron seguir adelante sin uno de los receptores más exitosos en la historia de la franquicia.
Las especulaciones sobre Bryant han rodeado a los Cowboys desde el final de la temporada 2017, cuando se sugirió por primera vez que el ex All-Pro podría necesitar un recorte salarial en el próximo año. Antes de su corte, él tenía planeado ganar $12.5 millones en 2018 cosa que también hubiese costado $16.5 millones contra el tope salarial.
Todo eso se remonta al contrato de cinco años, $70 millones que firmó en el verano de 2015, y que tuvo problemas con cumplir las expectativas en las últimas temporadas.
Los Cowboys obviamente estaban dispuestos a separarse de su receptor estelar, pero no habían estado dispuestos a decir mucho al respecto. Tanto a Jerry como a Stephen Jones se les preguntó sobre la situación el mes pasado en el NFL Combine en Indianápolis, y ninguno estuvo dispuesto a dar más detalles.
"Esa es una de las cosas que vamos a tener que solucionar mientras seguimos avanzamos en nuestro futuro", dijo Stephen Jones.
Claramente, la oficina llegó a un consenso sobre qué funcionaba mejor para ellos. El corte de Bryant libera aproximadamente $8 millones en espacio de tope salarial, dándoles más espacio para maniobrar en la agencia libre.
Ya se han tomado medidas para dar cuenta de la ausencia de Bryant. Los Cowboys firmaron a Allen Hurns a un contrato de dos años y $12 millones el 23 de marzo. También contrataron al veterano Deonte Thompson, presumiblemente para compensar la pérdida de Brice Butler.
Esas adiciones dejaron en claro que los Cowboys intentaban dejar ir a Bryant, y ahora no cabe la menor duda.
Además de que Hurns puede ayudar a reemplazar a Bryant, aún no se puede negar que este es el final de una era para los Cowboys. Desde el momento en que fue reclutado como la selección global No. 24 en el Draft de la NFL 2010, Dez Bryant no solo ha sido la cara de la franquicia sino el alma.
Un nativo de Lufkin, Texas, Bryant se convirtió en un jugador dinámico integrado con la marca de los Cowboys, su celebración de touchdown en la que forma una "X" es sinónimo de la estrella de los Cowboys.
La selección de primera ronda de los Cowboys en 2010 logró formar parte de tres Pro Bowls en ocho temporadas, incluyendo una selección All-Pro en 2014 con 16 touchdowns, la cantidad más alta en su carrera.
Junto con sus impresionantes estadísticas, Bryant ha sido notado por su actitud feroz y su pasión por el juego. Esa llama lo motivó a 531 recepciones en su carrera para un total de 7,459 yardas, más un récord de franquicia de 73 touchdowns.
Esa actitud también lo metió en problemas de vez en cuando. Las jugadas más destacadas de Bryant durante su carrera de ocho años fueron discusiones sobre su comportamiento enérgico, que de vez en cuando se desbordaba en las laterales de los Cowboys.
"Ciertamente es visible para cualquiera que mire nuestros juegos", dijo Stephen Jones. "Dez es ciertamente un tipo fogoso que juega con mucha emoción dentro y fuera del campo. A veces, eso puede ser una distracción".
En diciembre, Bryant dijo que permitió que las críticas externas lo distrajeran una que otras veces. También dijo que practicó y jugó con tendinitis en la rodilla durante la temporada.
En febrero, durante una entrevista con la estación de radio local 105.3 FM The Fan, Bryant afirmó rotundamente que prefería quedarse en Dallas.
"Al final del día, solo quiero ganar", dijo. "Quiero jugar fútbol. Quiero usar la estrella. Quiero ser parte de ese Super Bowl porque siento que puede suceder ".
Eso no es lo único que Bryant ha dicho en su propio nombre. En diciembre, él dijo a los periodistas que no tenía ningún interés en reducir su salario de $12 millones.
Sin embargo, durante esa entrevista en febrero, dijo que su contrato era un asunto que discutiría en privado con su agente y la familia Jones.
Bryant también se aseguró de apostarse a sí mismo, ya que el jugador de 29 años insistió en que tiene la intención de volver a su forma de Pro Bowl en 2018.
"Solo quiero esforzarme, solo quiero trabajar. Eso es todo lo que quiero hacer", dijo. "Porque te lo prometo, le voy a callar la boca a mucha gente".
Él probablemente aún tendrá esa oportunidad. Bryant no cumple 30 años hasta noviembre, y ha registrado temporadas de 796 yardas y ocho touchdowns, además de 838 yardas y seis touchdowns en los últimos dos años.
Aún si eso no alcanza el nivel de sus tres temporadas de más de 1,200 yardas desde 2012-14, eso lo ubica como uno de los receptores agentes libres más atractivos de esta temporada baja, y sin duda debería ser suficiente para conseguirle un contrato con otro equipo.
En cuanto a los Cowboys, ellos avanzarán con un cuerpo de receptores más joven. Hurns ingresa en el cargo de receptor titular con tan solo 26 años, y se podría apostar a que el equipo convierta la posición de receptor en una prioridad para el draft 2018.
Lo que sea que ellos decidan, la especulación ha terminado y los Cowboys de hecho sí van a seguir adelante sin Dez Bryant.
